La contaminación ambiental, los productos químicos de los tintes, el uso de secador y las planchas, el sol, etc hacen que nuestro cabello se resienta y se dañe. Al igual que cuidamos otras partes de nuestro cuerpo, el pelo también necesita un cuidado especial. En este post, os vamos a proponer algunas mascarillas a base de uno de los productos que ha pasado de ser temido a contener numerosos beneficios: el huevo.
Con vitaminas B5, B12, A, D, E; selenio; hierro; yodo; ácido fólico y colina, el huevo es un nutriente potente que ayuda a nuestra cabellera a tener un aspecto fuerte, resistente, brillosa y sana.
A continuación, tienes algunas recetas de mascarillas que puedes hacer fácilmente en casa y que contiene productos naturales.
Mascarilla para cabello seco
Ingredientes:
- 1 huevo
- 1 cucharadita de aceite de oliva
- 2 cucharadas de mayonesa
Modo de preparación:
Batir el huevo, agregar la cucharada de aceite de oliva y las dos de mayonesa y mezclar hasta que se forme una unidad.
Aplicación:
Poner el preparado sobre el cabello. Dejar actuar sobre él entre 20 y 30 minutos. Retirar el producto y lavar el pelo.
Mascarilla anti-frizz
Ingredientes:
- 2 fresas grandes
- 1 yogur natural
- 2 cucharadas de miel
- 2 claras de huevo
Modo de preparación:
Triturar las fresas. Añadir el resto de ingredientes (yogur, miel y claras de huevo) y mezclarlos hasta que sea una pasta homogénea.
Aplicación:
Extender la mezcla sobre la cabellera. Esperar durante 30 minutos para que haga efecto. Eliminar con agua tibia y lavar el pelo.
Mascarilla para el cabello débil y que se quiebra fácilmente
Ingredientes:
- 1 huevo
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 2 cucharadas de miel
Modo de preparación:
Batir el huevo. Posteriormente, agregar los demás productos hasta que se mezclen completamente.
Aplicación:
Aplicar sobre el cuero cabelludo y dar un masaje. Dejar actuar durante media hora y finalmente, lavar el pelo con un champú suave.
Es importante recordar que el huevo entero se utiliza en el cabello normal. Solamente la yema para el cabello seco y la clara sola en el cabello graso. Esta última opción se puede emplear cada dos semanas mientras que las otras dos, una vez al mes.